INSUFICIENTE AUMENTO SALARIAL EN EL PODER JUDICIAL: SINDICATO PROGRESISTA

Mediante un comunicado, el Sindicato Progresista condenó enérgicamente la reciente decisión del Sindicato Único del Poder Judicial del Estado de aceptar un aumento salarial que calificaron como “raquítico y una traición” a las y los trabajadores. 

Esta medida, afirmó el gremio, deja en situación de vulnerabilidad económica a la base trabajadora, mientras perpetúa las desigualdades dentro de la institución.

De acuerdo con información oficial disponible en la página web del Poder Judicial de Yucatán, el Sindicato Único sostiene que existen las condiciones económicas para otorgar un aumento salarial digno, estimado entre el 12% y el 15%. Sin embargo, el incremento aceptado por dicha organización no se acerca a estas cifras, lo que ha generado un descontento generalizado entre las y los empleados.

El Sindicato Progresista advierte que este aumento es insuficiente frente a los desafíos económicos que enfrentan las familias trabajadoras, como el alza de las cuotas del ISSTEY en un 11%, el incremento de los costos de la canasta básica y las deducciones del ISR.

Otro punto de controversia, señalaron, es la diferencia en los incrementos salariales entre los trabajadores de base y los altos mandos del Poder Judicial. Mientras los magistrados y consejeros –quienes ya perciben altos salarios– obtuvieron un aumento del 3%, los empleados de menor rango recibieron un ajuste que no compensa la inflación ni la pérdida de poder adquisitivo.

El Sindicato Progresista calificó este acto como una “falta de solidaridad y una traición directa” a las y los trabajadores que confiaron en su representación sindical.

En respuesta a esta situación, el Sindicato Progresista aseguró que intensificará sus esfuerzos para convertirse en el Sindicato Mayoritario del mencionado Poder de gobierno. Afirman que su objetivo es representar a la base trabajadora con transparencia, dignidad y compromiso, dejando de lado intereses personales.

Este pronunciamiento evidencia el descontento que impera entre los trabajadores del Poder Judicial del Estado, quienes exigen mejores condiciones salariales y laborales.

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