Elementos de la SSP Yucatán que hacían su rutina de vigilancia en el Centro de Mérida, respondieron a un reporte de disturbio en un comercio ubicado en la calle 65.
El agente causó problemas en la Dulcería Carlitos I, y alteró el orden tras no encontrar un producto de su interés, arrojando mercancía al suelo y realizando actos indebidos en el establecimiento.
Según testigos, el hombre entró al establecimiento en aparente estado de ebriedad y comenzó a agredir verbalmente a la dueña y a su empleada.
Después, orinó sobre los dulces del mostrador y aseguró que no recibiría sanción alguna porque era un comandante.
Ante esa conducta el sujeto fue detenido y trasladado a la cárcel pública.
Se confirmó que se trata de un elemento en descanso de la SSP, por lo que se notificó a los mandos correspondientes para los procedimientos administrativos y legales pertinentes.
