El empleado de la empresa Mitza, José Sonda, sufrió un accidente el pasado domingo cuando se lesionó con las aspas de una máquina hidratadora.
La señora Lizeth Kú, recibió una llamada de su esposo para pedirle que acuda de inmediato a su centro laboral, en la carretera Mérida-Progreso, para despedirse de ella porque perdería la vida.
La mujer llegó a la empresa y alcanzó a ver a su marido con vida, quien se despidió de ella con un abrazo y un beso.
Paramédicos lo atendieron y mediante una ambulancia lo trasladaron a un hospital, donde falleció finalmente apenas fue ingresado.
Testigos comentan que los gritos del trabajador alertaron a sus compañeros que vieron prensado al hombre de 29 años y desconectaron la máquina, pero fue demasiado tarde.