El Ayuntamiento de Mérida informó que no hay interés por adquirir más calesas eléctricas por parte de los prestadores de este servicio, por lo que buscan que los caballos de estos vehículos tradicionales tengan áreas de sombras y bebederos.
El secretario técnico de la Unidad de Turismo de la comuna, Armando Casares Espinosa, declaró que por el momento se han mantenido con las mismas seis calesas eléctricas con las que iniciaron cuando se dió el banderazo hace dos años, aún cuando se anunció que podría solicitarse seis más.
No obstante, dijo, trabajan junto con el director de Prosperidad y Bienestar Económico, Mauricio Díaz Montalvo, para apoyar a los caleseros, toda vez que hay un programa para rescatar estos vehículos y poner a trabajar a todas.
Al referirse sobre la elección entre las tradicionales o las eléctricas, mencionó que sí hay personas que prefieren que los animales no estén en el sol, por ello, reiteró que tienen un proyecto completo para que tengan área de sombras y bebederos.
“En Yucatán se da la opción y hay gente prefiere una calesa eléctrica”, dijo.
Por otro lado, Casares Espinosa recordó que en algunos lugares como Guadalajara, Jalisco, se han prohibido las calesas movidas por caballos por presión de las asociaciones protectoras de animales.
“En Mérida se inició el cambio paulatino, pero se ha complicado la transición”, aseveró.
El costo para usar una calesa eléctrica es de $400 pesos con un cupo de hasta 4 personas y dura 40 minutos el recorrido. El servicio es todos los días de 9:00 am a 11:00 pm.