Más de millón y medio de pesos en alhajas logró recuperar la Policía Estatal de Investigación (PEI) de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP), poco antes de que fueran enviadas a otro estado de la República, luego de que el encargado de una joyería en Mérida cayera en un engaño telefónico.
Ayer lunes, en una plaza comercial del norte de Mérida, el encargado de una joyería recibió una llamada. Le hicieron creer que la voz a través del teléfono era la de la propietaria del establecimiento, que estaba en problemas y necesitaba con urgencia que le enviara un lote de joyas.
Le dijeron que el chofer de un taxi de plataforma recogería los artículos para depositarlos en una empresa de paquetería, así que colocó en una caja una pulsera de oro, una esclava de diamante, un pendiente de zafiro, un cuarzo con brillante, un anillo, entre otros objetos, y los entregó.
Instantes después el hombre empezó a dudar y contó lo ocurrido a un agente de la PEI que está asignado a esa plaza comercial como parte del operativo decembrino implementado por la SSP en todo el Estado.
El policía investigador intuyó que se trataba de un engaño y enseguida lo comunicó al Centro de Control C5i de la SSP, que a su vez activó la alerta a las unidades de campo y al sistema de videovigilancia.
El taxi de plataforma fue localizado y las joyas recuperadas y devueltas a l local comercial. El chofer fue liberado tras comprobarse que no estuvo involucrado en el ilícito.