En conferencia de prensa vía zoom, el empresario, Fernando Barbachano Herrero, aseguró que el también empresario, Rodolfo Rosas Moya, no tiene posesión legal del hotel Mayaland y lo acusó de utilizar la fuerza pública para tomar como rehén el sitio de hospedaje ubicado en la zona arqueológica de Chichen Itzá.
Además, señaló que no ha obtenido respuesta del Gobernador de Yucatán, Mauricio Vila Dosal, y agregó que “al buen entendedor pocas palabras” después de solicitarle un respetuoso y enérgico llamado, mediante desplegados en medios de comunicación, para que garantice el cabal cumplimiento de la ley, el respeto a las instituciones, se favorezca y privilegie el estado de derecho y la certeza jurídica; en el cuál, también le reitera que no existe documento legal alguno que legitime o justifique el allanamiento en el hotel y el robo hacia su empresa (Posada Chichen Itzá).
Al igual que hace al mandatario estatal directamente responsable de su seguridad personal y de su familia. Cabe mencionar que Rodolfo Rosas Moya es hermano de la actual Secretaria de Administración y Finanzas del Gobierno del Estado, Olga Rosas Moya.
“En ningún momento cedí la propiedad, (Rosas Moya) está tomando el hotel por la fuerza, no tiene posesión legal, cuando ya procediera la compra sería con los pagos liquidados, no tenía derechos sobre el hotel”, reiteró en diversas ocasiones.
El pasado 19 de febrero del presente año, la Fiscalía General del Estado, en coordinación con su homóloga de Quintana Roo, ejecutaron el embargo y aseguramiento del hotel Mayaland, ubicado en el municipio de Tinum, por una denuncia por delitos de fraude y despojo en agravio del empresario yucateco Rosas Moya; la venta de este inmueble comenzó en 2020 por la cantidad de 10 millones de dólares.
Barbachano Herrero informó que se le pagaron 4.5 millones de dólares en octubre de 2020 y faltarían 1.5 millones de dólares más, para la firma y entrega del hotel, que se debieron saldar en diciembre del mismo año, pero el interesado Rosas Moya no contestó, aún cuando este último indicó que fue el heredero del predio donde se localiza la zona arqueológica, el que no brindó una cuenta donde depositar el dinero faltante.
“Rosas Moya ha inventado toda esta serie de movimientos, a efectos de crear un escándalo. No voy a negociar en una situación con nadie donde los hoteles están tomados por la fuerza”, enfatizó Barbachano Herrero.
También, afirmó que no ha incumplido con el arreglo y contrato, porque “aquí hubo un contrato de compraventa y el incumplimiento viene del señor Rosas Moya, por no haber pagado”, lo ya abonado se tomaría como una penalización, así como la garantía de arras (compromiso del comprador de adquirir el inmueble) de 500 mil dólares; además de que faltarían 4 millones de dólares más para la formalización de la escritura pública, para completar los 10 millones de dólares.
El abogado Manuel Rodríguez, también presente en la rueda de prensa virtual, mencionó que su cliente ha interpuesto tres amparos ante las instancias antes mencionadas: solicitando el pago pendiente por la pena convencional, así como dejar sin efecto el juicio mercantil y penal, por los presuntos delitos de fraude y despojo.